Biblioteca de Palafolls
Una de las obras póstumas del renombrado arquitecto Enric Miralles, es la biblioteca pública de Palafolls. El edificio está situado en esta localidad barcelonesa, un núcleo urbano en el que se ha apostado por la arquitectura contemporánea a través de la colaboración de firmas destacadas como la de Arata Isozaki, el arquitecto que ha diseñado el el pabellón polideportivo de Palafolls.
Como dejó escrito Miralles, el alcalde Valentí Agustí, está construyendo una ciudad donde pregunta a cada arquitecto cuáles son sus sueños.
El trabajo de la biblioteca de Enric Miralles y Benedetta Tagliabue ha buscado dar a la biblioteca una organización de tipo laberíntico, compuesta por una serie de habitaciones y jardines ensamblados de manera no lineal.
El edificio, que empezó a construirse hace casi diez años, es un experimento que usa cada desarrollo del proyecto, con sus continuos cambios y variaciones, adaptando los volúmenes a las necesidades de espacio y habitabilidad propias de una biblioteca municipal.
Finalmente, la biblioteca está medio hundida entre los árboles de la zona, cubierta de forma que establece un diálogo libre con las montañas que circundan el municipio. Su elemento más significativo es, sin duda, la espectacular cubierta, con suaves ondulaciones, que recuerdan el entorno geográfico, dando una cierta continuidad visual.
La biblioteca, situada en el Parque de las Esplanes, ocupa una superfície de 623 metros cuadrados, distribuidos en una única planta proyectada para una población de unos 8.000 habitantes, que ve como se añade a su paisaje urbano un nuevo edificio singular.
El edificio entró en funcionamiento el pasado mes de marzo.
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